Se acerca el verano y empezamos a prestar más atención a esos quilos de más. Queremos perderlos con rapidez para vernos mejor cuando nos pongamos el bañador para ir a la playa o a la piscina. Existen un sinfín de métodos para adelgazar, pero no todos tienen la misma eficacia ni son igual de seguros.
Si quieres perder unos quilos con seguridad debes tener en cuenta varios aspectos:
- El peso ideal, adecuado y saludable no es el mismo para todos y deben prevalecer siempre los criterios de salud sobre los criterios estéticos.
- Las dietas milagro no existen e implican riesgos para la salud.
- La pérdida de peso debe basarse en una combinación de ejercicio físico y dieta, con restricción adecuada del aporte calórico.
Dietas para perder peso
Las dietas para perder peso deben aportar 500 kcal al día menos de las necesarias para mantener el peso. Las dietas más habituales son las de 1.200, 1.500 y 1.800 kcal/día. Las dietas de menos de 1.200 kcal no son aconsejables y requieren un seguimiento especial.
- Cuando peses los alimentos, ten en cuenta que el peso de los alimentos se refiere en crudo y libres de desperdicios (piel, huesos, cáscara, espinas, etc.). Las pastas y arroces al hervirlos triplican su peso en crudo y las legumbres lo duplican.
- Cocina con poco aceite. El aceite más aconsejable es el de oliva virgen extra, aunque también puedes usar los de semillas como girasol, soja o maíz. Evita la mantequilla, manteca o margarinas.
- Bebe agua abundantemente.
- Consume leche y quesos semidesnatados.
- Come todos los días verduras y hortalizas frescas bien lavadas.
- Toma al menos 2-3 piezas de fruta al día frescas y de temporada, y evite la compota o el almíbar.
- Retira en crudo la grasa visible de las carnes y la piel de las aves.
- No consumas productos procesados ni precocinados, bollería ni aperitivos envasados.
- No consumas alcohol.
- Cambia el azúcar por sacarina.
Puedes reforzar la dieta con productos especializados que encontrarás en las farmacias. Consulta con tu farmacéutico/a.
Ejercicio imprescindible
La actividad física es el único medio para gastar energía sobre el que tenemos control directo y es la mejor forma de evitar la ganancia de peso: hasta 150 minutos de actividad aeróbica de intensidad moderada, 75 minutos de actividad aeróbica de intensidad vigorosa o el equivalente combinado de los dos tipos de actividad cada semana te ayudarán a mantener tu peso a raya.
Si el objetivo no es mantener el peso, sino perder algunos quilos, deberás acompañar el ejercicio físico de una dieta con restricción calórica.
Consulta con tu médico. Él te ayudará a establecer una dieta y un programa de ejercicios adecuado a tus necesidades.
Fuentes: https://www.fen.org.es/vida-saludable/principios; Guía práctica de Salud semFyC.